A continuación le indicamos algunas medidas que puede tomar para ayudar:

Obtenga información

Cuanto más sepa acerca de la depresión, mejor podrá comprender por lo que está pasando la persona.

• Sepa qué es verdad acerca de la depresión y qué es un mito. Los mitos incluyen pensar que la depresión no es real o que usted es débil si está deprimido.
• Sepa cuáles son las señales de advertencia de suicidio, como hablar mucho acerca de la muerte, regalar cosas y redactar un testamento. Si las observa, llame al médico.
• Llame al 911 o a la ayuda de emergencia si cree que:
  • La persona va a hacerse daño o va a hacer daño a otras personas. Por ejemplo, la persona tiene un plan escrito o un arma, o está guardando (acumulando) medicamentos.
  • La persona escucha o ve cosas que no son reales.
  • La persona parece estar pensando o hablando de una manera extraña, que es diferente de su conducta habitual.

Ayude con el tratamiento profesional

Si tiene permiso, usted puede:

• Ayudar a la persona a concertar visitas con un médico u otro profesional de la salud y acompañarla a las visitas.
• Ayudar a la persona a manejar los medicamentos.
• Conocer los efectos secundarios de los medicamentos y comunicarse con el médico si es necesario.
• Recordarle a la persona que tiene depresión que el medicamento es importante y que la dosis o el medicamento pueden cambiarse para reducir o eliminar los efectos secundarios.

Apoyo en el hogar

Es posible que una persona que tiene depresión se sienta sola en el mundo. Su apoyo puede ayudarla.

• Escuche cuando la persona quiera hablar. Si usted está presente para ayudar a la persona a hablar, esto puede ayudar a la persona a sentirse mejor o a continuar con el tratamiento.
• Evite darle consejos. Pero señale sutilmente que no todo es malo y transmítale esperanza. Inste a la persona a continuar con el tratamiento. No le diga a la persona que es perezosa o que debería poder superar la depresión.
• Mantenga su relación tan normal como sea posible, pero no finja que la depresión no existe o que no hay ningún problema.
• Pídale a la persona que haga actividades con usted, como ir a caminar o al cine, y aliéntela a continuar con sus actividades favoritas. Si la persona se niega, no hay problema. Pero asegúrese de volver a preguntar en el futuro. No insista demasiado; esto puede hacer que la persona se sienta peor.
• Pregunte qué puede hacer para ayudar en la vida diaria. Podría ayudar con las tareas domésticas o en el cuidado del césped, llevando a los niños a la escuela o haciendo diligencias.
• No se ofenda. Si usted es el cónyuge o es una persona muy cercana, es posible que se sienta herido debido a que la persona no está prestándole atención y podría parecer enojada o despreocupada. Recuerde que su ser querido sigue preocupándose por usted, pero simplemente no puede demostrarlo.

Cuide de sí mismo

Pasar mucho tiempo con una persona que tiene depresión puede ser difícil también para usted. Estos consejos para el cuidador pueden ayudar:

• En primer lugar, cuídese. Haga actividades que disfrute, como ver a su familia o ir al cine.
• No ayude demasiado. Un error común que cometen los cuidadores es proporcionar demasiada atención. Aunque no lo admitan, a las personas les gusta ayudarse a sí mismas. Tómese tiempo libre.
• No lo haga solo. Pídales a otras personas que le ayuden o únase a un grupo de apoyo. Cuanto más apoyo tenga, más ayuda puede brindar a la persona.