Una toxina es un veneno producido por células u organismos vivos. Las toxinas pueden causar problemas de salud por contacto o cuando el cuerpo las absorbe.

La gravedad de una reacción ante una toxina varía mucho. Las picaduras de abeja causan una reacción menor en la mayoría de las personas. Pero comer alimentos que contienen la toxina botulínica puede causar una reacción mortal. Por lo general, la gravedad del problema de salud causado por una toxina depende de:

• La frecuencia con que una persona esté expuesta a la toxina.
• La cantidad de toxina que haya estado en contacto con el cuerpo o la cantidad que este haya absorbido.
• Lo venenosa que sea la toxina.

El tratamiento puede ser tan simple como mantenerse alejado de la toxina y limitar la exposición en el futuro. En algunos casos, el tratamiento con sustancias, como un antídoto, puede prevenir una enfermedad grave.

Afortunadamente, los niveles de la mayoría de las toxinas en el ambiente son bajos.