Casi todos los padres de un recién nacido tienen preguntas e inquietudes, especialmente cuando el bebé no se siente bien.
Y surge la gran pregunta: ¿debería llevar a su bebé al médico?
Si su bebé se siente mal, aquí le damos una pequeña ayuda para saber a qué tiene que prestar atención, cuándo llamar a su médico y por qué.
Fiebre.
La fiebre puede ser la primera señal de algo serio.
Y puede suceder rápidamente.
¿Pero qué es fiebre para un bebé?
No se puede saber simplemente por medio del tacto.
Una temperatura rectal de 100.4 grados Fahrenheit o 38 grados centígrados o más alta es fiebre.
Y es hora de ir al médico, especialmente si su bebé es recién nacido.
Vómito.
Bien.
Como usted ya sabe, los bebés regurgitan.
Pero el vómito es otra cosa.
Viene con fuerza.
¿Y la diarrea?
Usted reconocerá la diarrea en el pañal de su bebé porque es diferente de lo que suele encontrar.
Es acuosa.
Y puede ser de un color diferente.
Si el vómito se ve un poco verde o amarillo brillante, llame o vaya al médico.
Y llame si el vómito o la diarrea continúan por más de un día.
Esto es porque su bebé puede perder mucha agua fácilmente y deshidratarse.
Un salpullido.
Es común que un recién nacido tenga un salpullido u otro problema de la piel.
Pero si el salpullido aparece con fiebre o su bebé al mismo tiempo parece estar molesto, o si ya está enfermo, llame a su médico.
¿Qué pasa si su bebé no come?
Negarse a comer en más de 2 ocasiones puede ser serio.
Es una buena razón para llamar a su médico.
Bien.
Ahora por si acaso, estos son algunos síntomas serios que son definitivamente graves.
Y por graves, me refiero a graves de necesitar atención de urgencia de inmediato.
Obtenga ayuda de urgencia si su bebé tiene problemas graves para respirar.
Usted sabrá, porque su bebé dilatará las fosas nasales.
Y la barriguita se le moverá de adentro hacia afuera con cada aliento.
También consiga ayuda de urgencia si su bebé está muy débil o parece una muñeca de trapo o no responde cuando lo alzan en brazos, lo tocan o le hablan.
Repasemos esto de nuevo: Busque ayuda de urgencia si tiene problemas graves para respirar, está débil o flojo o no responde.
Tener un bebé recién nacido que pudiera estar enfermo puede causar miedo.
Pero comprender a qué hay que prestar atención y cuándo llamar al médico puede ayudarle a prepararse mejor para conseguir la atención que su bebé necesita cuando la necesita.
Usted conoce a su bebé mejor que nadie, de modo que, si tiene cualquier pregunta o inquietud, llame a su médico o a la línea de atención de enfermería.