Después de una disección de ganglios linfáticos, tendrá que evitar hacer esfuerzos y darse tiempo para sanar.
Estas son algunas cosas que puede hacer para ayudarse a sanar.
Los primeros días después de la cirugía, es probable que se sienta débil y que tenga dolor y rigidez en el hombro.
Descanse cuando lo necesite y trate de dormir lo suficiente.
Para prevenir la hinchazón, eleve el brazo por encima del nivel del corazón siempre que esté sentada o acostada.
Le recetarán un analgésico y tal vez un antibiótico.
Tome los medicamentos exactamente según las indicaciones.
Informe a su médico si tiene cualquier problema con los medicamentos.
Conducir mientras toma analgésicos no es seguro.
Su médico le dirá cuándo puede empezar a conducir de nuevo.
Es posible que tenga uno o dos tubos, llamados drenajes, debajo del brazo afectado.
Sirven para recoger líquido.
Recibirá instrucciones sobre el cuidado de las incisiones y de los drenajes.
Tendrá que mantener secas y limpias las incisiones, así que pregúntele a su médico cuándo puede bañarse o ducharse.
Tenga en cuenta que, después de que le hayan extirpado los ganglios linfáticos, tendrá un mayor riesgo de hinchazón en el brazo afectado.
La hinchazón se llama linfedema.
Recibirá instrucciones sobre cómo prevenir la hinchazón y la infección, incluyendo ejercicios suaves para hacer con el brazo.
Mientras sana, tendrá que tener cuidado con el brazo, de modo que...
no levante nada pesado, como una aspiradora, bolsas pesadas de ningún tipo o a un niño.
Y no haga ejercicio intenso ni tareas caseras para las que tenga que usar el brazo afectado.
Pero siga moviéndose.
Caminar puede ayudar a prevenir los coágulos sanguíneos y otros problemas, como el estreñimiento.
Así que trate de aumentar la distancia que camina cada día.
Y mientras sana, tendrá que prestar atención a cualquier problema.
Llame a su médico si tiene señales de infección o linfedema.
Las señales de infección incluyen...
aumento del dolor, la hinchazón, la temperatura o el enrojecimiento...
vetas rojizas que salen de la incisión...
pus que sale de la incisión...
o fiebre.
Las señales de linfedema incluyen...
hinchazón en el brazo o en la mano...
dolor...
debilidad que sigue empeorando...
u hormigueo...
una sensación de pesadez o plenitud en el brazo...
una sensación de que las joyas o la ropa están ajustadas...
o rigidez en la mano o en la muñeca.
Todo esto puede parecer demasiado que hacer... pero todas estas cosas son importantes, ya que pueden ayudarle a sanar y a evitar ser hospitalizada.
