Colaborar estrechamente con su médico es una de las cosas más importantes que puede hacer para ayudar a estar lo más saludable posible.
Pero, para muchas personas, es difícil de hacer.
"Los médicos están tan ocupados.
No quiero molestarlos".
"El médico es el que sabe, no yo.
Yo solo escucho".
"Tengo miedo de decir algo que esté mal".
"En realidad le tengo un poco de temor a mi médico.
Me intimida".
No tiene que ser una lucha colaborar con su médico.
Al fin y al cabo, tienen una meta en común... su buena salud.
Estas son algunas cosas que puede hacer.
Primero... esté preparado.
"Antes de mi visita, escribo lo que quiero decir... cómo me siento...
y cualquier síntoma que esté sintiendo.
También anoto las tres preguntas más importantes que tengo.
De este modo recuerdo preguntar lo que más me importa".
Segundo... no tenga miedo de decir lo que piensa.
"Le pregunté a mi médico lo que pensaba él.
Me dijo cuál era su plan, y me dio una buena idea de qué esperar.
Luego le expliqué lo que yo pensaba.
Hablamos sobre mis opiniones y cambió un poco el plan.
Ahora me parece que es nuestro plan".
Esta es una tercera idea: Siempre haga preguntas para asegurarse de que entiende.
"Mi médico me dijo que necesitaba programar otro análisis de sangre para la semana siguiente... y yo no estaba seguro de por qué.
Entonces le pregunté.
Y ahora entiendo lo importante que es esta prueba".
Finalmente, considere llevar a un acompañante para que le ayude...
especialmente si tiene problemas para recordar o si quiere apoyo.
"Llevo a mi esposo a todas mis citas.
Ambos hacemos preguntas y tomamos notas.
Luego las comparamos.
Si hay un problema, llamo y pregunto sobre eso".
Una buena colaboración con su médico significa que ambos escuchan, ambos hablan y ambos hacen preguntas.
Véalo de esta manera.
Su médico es el experto en salud.
Usted es el experto en sí mismo.
Cuando trabajan juntos, usted recibe la mejor atención de salud.
