Mantener seguro a su hijo... ¿No es eso lo que preocupa a todos los padres?
Y cuando su hijo tiene epilepsia, esas preocupaciones se multiplican.
Puede ser difícil dejar a su hijo fuera de su vista.
Es posible que la preocupación lo acompañe siempre.
Pero puede ser útil saber que hay cosas que puede hacer para mantener seguro a su hijo, incluso cuando usted no está presente.
En el dormitorio, añadir rieles laterales acolchados a la cama puede proteger a su hijo de lesiones.
No deje a su hijo solo en la bañera.
Los niños mayores con epilepsia deberían ducharse en lugar de bañarse.
Y siempre deben evitar cerrar con llave la puerta del baño.
Al aire libre, asegúrese de que su hijo use un casco al montar en bicicleta, esquiar o patinar.
Y los niños epilépticos nunca deberían nadar solos.
En la escuela, asegúrese de que los maestros y los entrenadores sepan que su hijo tiene epilepsia.
Dígales qué esperar y qué hacer si tiene un episodio de convulsiones.
Si su hijo tiene que tomar medicamentos en la escuela, tenga disponible un suministro con la enfermera de la escuela.
Y establezca un horario para que su hijo pueda tomar sus medicamentos durante el almuerzo u otros descansos.
Piense en obtener una pulsera o un collar de alerta médica para su hijo o hija.
En caso de emergencia, le permite saber a otras personas que su hijo tiene epilepsia.
Recuerde que los niños pueden tener dificultad porque les preocupa tener un ataque de convulsiones o ser diferentes.
Ofrezca todo el apoyo que pueda.
Y asegúrese de que su hijo sepa que usted siempre está disponible para hablar y para responder a cualquier pregunta.
Tomar estos pasos será muy útil para darle tranquilidad y mantener seguro a su hijo.
