Si su hijo necesita una cirugía, un procedimiento o un tratamiento, es probable que sienta preocupación y angustia.
Tal vez le sirva saber que el equipo de atención médica utilizará anestesia para ayudar a su hijo a sentirse cómodo, relajado y libre de dolor.
Usted puede marcar una diferencia real en cómo se siente su hijo antes de recibir la anestesia ayudándolo a prepararse.
Una forma de ayudar es hablando con su hijo.
Explíquele de manera simple por qué le aplicarán anestesia.
Dígale a su hijo que es un método para aliviar el dolor y mantenerlo tranquilo durante un procedimiento o cirugía.
Los niños tienen una gran imaginación, y más si están nerviosos o temerosos, Así que evite términos como "sedar", "inyección" o "aguja".
Mejor use expresiones como "dormir una siesta"
o "colocar un pequeño conducto en la vena".
Los niños no requieren demasiados detalles.
Hable con su doctor sobre el tipo de anestesia que podría recibir su hijo.
El tipo de anestesia dependerá del procedimiento, la salud del niño o los resultados de las pruebas.
Estos son los tipos de anestesia que su hijo podría recibir y que su doctor tal vez mencione.
La anestesia general afecta a todo el organismo del niño.
Puede administrarse por vía intravenosa, respiratoria o ambas.
El niño no sentirá dolor.
También existe la anestesia regional.
Mediante una inyección, se aplica un medicamento que adormece una parte específica del cuerpo y bloquea el dolor.
Incluye anestesias espinales, epidurales y bloqueos nerviosos periféricos.
También está la sedación.
Se administran uno o más medicamentos por vía intravenosa.
Esto ayuda a que su hijo se relaje o se duerma para que no sienta dolor.
A veces, la sedación y la anestesia regional se pueden utilizar juntas.
La anestesia local, que puede ser un fármaco o inyección, se usa para adormecer una zona pequeña del cuerpo.
Antes de administrársela a su hijo, el anestesiólogo revisará posibles interferencias en el tratamiento, y el doctor explicará los riesgos y cómo se sentirá su hijo después.
Es posible que su hijo requiera más tiempo de descanso.
El efecto de la anestesia tarda en disiparse.
Infórmele a su especialista en anestesia si su hijo tiene algún problema de salud o si ha tenido alguna otra cirugía.
Avísale al especialista si algún familiar ha tenido inconvenientes con la anestesia, e infórmele sobre los medicamentos y productos naturales que su hijo usa.
Existe otro factor que puede anticipar.
El especialista en anestesia podría hacerle varias preguntas a usted y posiblemente a su hijo según la edad.
Su intención no es juzgar a nadie.
Solo quiere asegurarse de que su hijo esté a salvo.
Si cree que su hijo consume tabaco, cannabis, opiáceos o alguna otra sustancia, notifique al anestesiólogo.
Tal vez deba modificar su medicación para garantizar su seguridad.
Esta información se mantendrá en privado.
Algunos equipos médicos cuentan con un especialista en psicología pediátrica.
Este profesional puede ayudarlos a comprender el proceso de anestesia y a prepararse.
Si el personal del hospital lo aprueba, permita que su hijo elija cosas para llevar al hospital que puedan consolarlo antes y después del procedimiento.
Si la cirugía o procedimiento de su hijo implica una estancia en el hospital, recuerde llevar lo que su hijo necesita para dormir, como un equipo CPAP, si lo usa, o tal vez su manta o un juguete de peluche.
Pensar en que su hijo va a ser anestesiado o estar lejos de su hijo mientras reciben anestesia, puede ser estresante.
Pero saber que su anestesiólogo y el resto del equipo médico están capacitados y concentrados en ayudar a que su hijo esté seguro y cómodo puede ayudar.
Y si tiene alguna pregunta o inquietud, siempre puede hablar con su anestesiólogo.
