De la mañana a la noche y, a veces, durante toda la noche, los bebés necesitan de usted para todo: desde comer a cambios interminables de pañal.
Pero por sobre todo, necesitan de usted para estar protegidos.
Aquí le damos algunas ideas a toda hora para ayudarle a mantener a su bebé seguro.
"¡Buenos días!"
Hasta el bebé más pequeñito puede retorcerse y escabullirse más rápido de lo que usted podría esperar.
De modo que cuando cambie o vista a su bebé, mantenga una mano sobre él o ella en todo momento.
Y use correas de seguridad en las mesas cambiadoras y las sillas altas.
Y ya que estamos hablando de mesas y sillas, asegúrese de que todos los productos que use su bebé -cunas, cochecitos, corralitos, sillas altas y mesas cambiadoras- sean seguros y estén protegidos.
Si usa artículos antiguos o usados, asegúrese de que cumplan con los estándares de seguridad vigentes.
Verifíquelo en línea con la Comisión de Seguridad de Productos del Consumidor o el Programa de Seguridad de Productos del Ministerio de Salud de Canadá.
"Vamos a pasear".
Para cada viaje en auto, de la guardería a la tienda y de vuelta a casa, asegúrese de que su bebé esté amarrado en un asiento para autos autorizado.
Y asegúrese de que el asiento esté instalado correctamente en su vehículo.
Si no lo sabe con certeza, pídale a un técnico certificado en asientos de auto que lo revise en forma gratuita.
Por lo general, se puede encontrar un técnico certificado en asientos de auto en su cuartel de policía o bomberos local.
Y cuando se baje del auto, nunca deje solo a su bebé en un automóvil.
No importa la razón.
Aun si piensa que va a volver en un minuto.
Este es un consejo que les sirve a muchos padres.
Ponga su teléfono, cartera o bolso en el asiento trasero, de modo que no se baje del auto sin ellos, ¡ni sin su bebé!
"¡Vamos a jugar!
¡Te veo!"
Divertirse y jugar con su bebé es saludable e importante para su desarrollo.
Pero juegue en forma segura.
Examine su casa con ojo crítico para detectar cualquier peligro potencial.
Esto incluye mantener todas las sustancias peligrosas -en particular los artículos de limpieza, medicamentos, fósforos, armas y herramientas- fuera del alcance y bajo llave.
Asegúrese de que su bebé no pueda agarrar ni quedarse atrapado con los cordones de las persianas y las cortinas.
Usted puede acortar los cordones o enroscarlos en ganchos que estén fuera del alcance.
Siempre mantenga las partes de juguetes, monedas, botones, pilas, bandas elásticas, globos y otros objetos pequeños, o partes de objetos, fuera del alcance.
Use tapones de seguridad o coberturas en todas las tomas de corriente.
Instale detectores de humo y de monóxido de carbono en su hogar, y cámbieles las pilas al menos una vez al año.
Y vigile a su bebé cuando esté con su mascota o las mascotas de otras personas.
Hasta la mascota más dulce podría lastimar a su bebé por accidente.
"¡Hora de comer!"
Mantenga las manijas de las sartenes en la estufa hacia la pared para que su bebé no pueda estirarse y tratar de alcanzarlas.
Mantenga los líquidos calientes, como café o sopa, fuera del alcance y lejos de su bebé.
Tenga cuidado cuando elija y prepare alimentos.
Triture las frutas y las verduras como uvas, arvejas (chícharos) y arándanos azules antes de dárselos a su bebé.
Y cuando su bebé esté listo para alimentos que se comen sin cubiertos, corte los alimentos en pequeños pedazos.
Mantenga los cuchillos y otras cosas con filo lejos de los bordes de la encimera y fuera de las mesas.
"¡A bañarse!"
Baje la temperatura de su calentador de agua a 120 °F (48.9 °C) para ayudar a prevenir quemaduras a causa del agua caliente.
Mantenga una mano sobre su bebé y nunca lo deje a solas en una bañera o lavabo de agua o cerca de estos, siquiera por un momento.
Si necesita dejar la bañera, lleve a su bebé consigo.
"¡Es hora de ir a dormir!"
A la hora de acostarse, siempre coloque a su bebé a dormir de espaldas para prevenir la muerte súbita del lactante.
No ponga a su bebé a dormir con un biberón.
Su bebé podría atragantarse si el líquido va por la vía equivocada e ingresa en los pulmones.
Estas son muchas "cosas para hacer y no hacer", pero todas contribuyen a mantener a su bebé lo más seguro posible.
Hay muchas otras también.
Si desea saber qué más puede hacer para mantener a su bebé seguro, siempre puede hablar con el médico de su hijo.
Puede ser atemorizador pensar en cuántas cosas podría tener que hacer para mantener a su bebé a salvo.
Pero con un poco de práctica y prestar atención a posibles peligros, su hogar será un lugar seguro donde su bebé puede crecer y explorar.