Algunas heridas pueden ser difíciles de tratar.
Es deseable asegurarse de que sanen en forma segura... lo más rápido posible... y sin infectarse.
La terapia con presión negativa tópica puede ayudar a conseguir esto.
Este tratamiento utiliza la presión negativa... una succión muy suave...
para ayudar a mantener la herida limpia eliminando líquidos y desechos de tejido de la misma.
La presión negativa también ayuda a que las células se multipliquen y se dividan.
Esto ayuda a que la herida cicatrice más rápido.
Una máquina llamada unidad de tratamiento crea la succión.
Usted también tendrá un apósito parecido a una esponja.
Este vendaje será del tamaño de la herida, y la herida se cubrirá herméticamente con plástico impermeable.
La unidad funcionará constantemente. Usted podría sentir un leve tirón en la herida.
Pero no debería dolerle. El médico le dirá si en un momento dado es necesario que apague la unidad.
La unidad de tratamiento también puede usar una luz o un sonido para alertarle sobre problemas, tales como un vendaje suelto. Si recibe una alerta, siga las instrucciones que le dieron. Esto puede implicar llamar a su equipo de atención.
Y el sistema es lo suficientemente pequeño como para transportarlo en una bolsa.
Por lo tanto, si comienza a sentirse mejor, usted podrá hacer muchas de sus actividades diarias.
Ahora bien, hay algunas cosas a las que tendrá que estar atento.
Su equipo de atención le dirá a quién llamar.
Llame de inmediato si tiene señales de infección.
Estas incluyen aumento del dolor, la hinchazón, la temperatura o el enrojecimiento alrededor de la herida o fiebre.
Llame si nota secreción que sale del vendaje ... si nota sangre nueva o mayor cantidad de ella ... si siente dolor mientras usa la unidad ... o si la cubierta de plástico le irrita la piel.
La presión negativa para el tratamiento de las heridas ayuda a que su herida sane... en forma segura...
y con poco esfuerzo de su parte.
Si tiene preguntas sobre el uso o cuidado de su dispositivo, consulte a su equipo de atención.
