Usted está pensando en hacer más actividad.
Pero es posible que se sienta algo inseguro sobre cómo empezar.
Si hacer actividad no es parte de su rutina, empezar puede ser lo más difícil.
Pero con la práctica, usted puede convertir la actividad en algo tan rutinario que simplemente hace porque es parte de su día...
como cepillarse los dientes y vestirse.
¿Está listo?
Déjeme que le dé ideas sobre cómo empezar.
En primer lugar, diga en voz alta: "Me comprometo a convertir la actividad física en una rutina".
Tal vez se sienta ridículo hablando con un video, pero comprometerse en voz alta es un paso importante.
Adelante, ¡hágalo! Yo espero.
Detenga el video si lo necesita.
Diga las palabras: "Me comprometo a convertir la actividad física en una rutina".
De acuerdo. Ya se ha comprometido.
Comencemos entonces.
Antes de empezar, hable con su médico acerca de las actividades que son seguras para usted.
A continuación, elija una actividad que le guste o que piensa que podría disfrutar.
¿Puede imaginarse a sí mismo haciéndola?
Ya se trate de ejercicio formal, como el ejercicio aeróbico en agua, o una actividad como la jardinería, bailar o pasear al perro, si disfruta lo que hace, es más probable que siga haciéndolo.
¿Le ayudaría hacer ejercicio con un amigo?
A veces, tener a alguien con quien hacer la actividad puede ayudar.
¿O prefiere hacer la actividad solo?
No hay respuesta correcta.
Usted elige.
Lo ideal sería hacer algún tipo de actividad durante 2 horas y media a la semana.
Si lo divide, eso es media hora al día durante 5 días.
¿Cree que puede hacerlo?
Si media hora de actividad al día le parece demasiado, ¿cuánto tiempo puede dedicarle?
¿Tal vez 15 minutos?
Empiece con eso.
Según se vaya poniendo en forma, será capaz de estar activo más tiempo.
Lo importante es hacer algo de actividad durante el día.
Incluso un poco puede ayudarle a ponerse en forma y a mantenerse saludable.
Si programa su actividad en su calendario, eso le recordará hacerla y seguir haciéndola.
Anotar qué tipo de actividad hace y cuándo la hace también puede ser útil.
Puede anotarlo en cualquier lugar, utilizando cualquier cosa desde una hoja de papel hasta un calendario o una aplicación gratuita para el móvil.
Si deja de hacer actividad un día o dos, no sea demasiado duro consigo mismo.
Simplemente empiece de nuevo.
Vuelva a comprometerse.
Una vez que se acostumbre a hacer actividad, se sentirá mucho mejor y no querrá dejar de hacerla.
Así que, ¡adelante! ...
Comprométase a convertir la actividad física en una rutina.
Haga un plan, sígalo y lleve un registro de lo que hace y de cómo se siente.