¿Debería usted tratar el dolor que le causa la hernia discal en casa con tiempo, medicamentos y ejercicio?
¿O es hora de probar la cirugía?
Para tomar esta decisión, usted querrá seguir los siguientes tres pasos: En primer lugar, conozca las ventajas y las desventajas de someterse a esta operación.
Luego, tómese tiempo para pensar en sus sentimientos personales y en lo que es más importante para usted.
Y finalmente, hable con su médico sobre todo esto.
De acuerdo, veamos primero las ventajas y las desventajas.
Una ventaja es que la cirugía podría aliviar el dolor antes.
Pero, no siempre funciona.
Y, al cabo de un año, la mayoría de las personas que se operaron no se encuentran mejor que aquellas que decidieron no operarse.
Estas son algunas cifras que nos ayudarán a explicarlo.
Tome dos grupos de 100 personas que tienen dolor en la pierna causado por una hernia discal.
Si un grupo se somete al tipo más común de cirugía lumbar, 3 meses más tarde entre 50 y 60 de esas personas tendrán poco o nada de dolor.
Si el segundo grupo opta por tratamientos no quirúrgicos... como medicamentos y ejercicio...
3 meses más tarde entre 20 y 30 de esas personas tendrán poco o nada de dolor.
Al cabo de 1 año, entre 90 y 95 personas en el primer grupo -el grupo que se sometió a cirugía- tendrán poco o nada de dolor.
Y en el segundo grupo -aquellas personas que no se operaron- entre 80 y 95 de ellas tendrán poco o nada de dolor.
Y 4 años más tarde, no hay ninguna diferencia entre los dos grupos.
De las 100 personas que optaron por la cirugía, 10 podrían tener que operarse de nuevo en 4 años.
Y de las 100 que optaron por el tratamiento no quirúrgico, 10 podrían necesitar cirugía en 4 años.
La cirugía lumbar tiene algunos riesgos.
Además de posibles problemas debido a la anestesia o una infección, existe un ligero riesgo de que la cirugía le dañe la espalda.
Aquí tiene más cifras para ayudar a explicarlo.
El tipo más común de cirugía es la microdiscectomía.
Si 1,000 personas se someten a este tipo de cirugía, hasta 3 de ellas tendrán un daño neurológico permanente como resultado.
Al igual que sucede con la mayoría de las cirugías, también hay un riesgo muy ligero de muerte.
Entre una y dos personas de cada 1,000 que se someten a una microdiscectomía acabarán muriendo debido a problemas relacionados con la cirugía.
Pero tenga en cuenta que sus sentimientos personales son tan importantes como estos datos médicos.
Así que piense en lo que es más importante para usted a la hora de tomar esta decisión.
Por ejemplo, estas son algunas razones personales que usted puede tener para operarse: ... La idea de operarse le parece aceptable.
... Ha probado algún otro tratamiento durante un tiempo y no le ha funcionado.
... Tiene tanto dolor que le resulta muy difícil vivir con él.
... Quiere controlar el dolor tan pronto como sea posible de modo que pueda volver al trabajo.
Y estas son algunas razones personales que usted puede tener para no operarse: ... La idea de operarse no le gusta en absoluto.
... Cree que otro tratamiento le está empezando a ayudar.
... El dolor no es tan intenso como para considerar la cirugía en este momento.
... El tiempo no es un problema, y mejorar poco a poco con un tratamiento diferente de la cirugía es aceptable para usted.
De acuerdo.
Una vez que haya reflexionado sobre las ventajas y las desventajas... así como sus sentimientos...
entonces es el momento de considerar el siguiente paso.
... Tal vez quiera hablar sobre ello con sus familiares o amigos.
... Es posible que quiera averiguar cómo otras personas en su misma situación tomaron su decisión.
... Quizá desee hacer más investigación sobre las ventajas y las desventajas.
... Una vez que crea que tiene toda la información que necesita, hable con su médico acerca de su decisión.
Juntos podrán decidir cuál es la mejor opción para usted.
