Magullarse una uña duele.
Y si se acumula sangre debajo de esta, la presión puede hacerle latir el dedo.
Hay una manera sencilla y segura de drenar sangre de una uña de un dedo de la mano o de un dedo del pie con un sujetapapeles común.
Pero no pruebe a hacerlo si se golpeó la uña hace más de dos días, si no le duele mucho, si el dedo, dedo del pie o articulación no tienen buen aspecto, o si tiene diabetes, enfermedad de las arterias periféricas o un problema con el sistema inmunitario.
Y no lo haga si no está seguro de poder hacerlo sin quemarse.
Bien. Busque un sujetapapeles, no una aguja, y enderécelo.
Sostenga un extremo del sujetapapeles con un paño para no quemarse los dedos, y caliente el otro extremo con una llama hasta que esté al rojo vivo.
Ahora toque la uña con esa punta caliente, justo donde está la sangre, para hacer un agujero derritiendo la uña.
No haga presión, solo tóquela.
No le va a doler porque allí no hay nervios.
Tal vez tenga que recalentar el sujetapapeles algunas veces.
Pero una vez que se haya formado el agujero, la sangre saldrá, y la presión dolorosa debería desaparecer.
Durante algunos días, sumerja el dedo en agua tibia y jabonosa por alrededor de 10 minutos, 3 veces al día.
No se preocupe si sale algo de líquido transparente o con algo de sangre.
Pero llame a su médico si tiene alguna señal de infección, como más dolor, hinchazón, enrojecimiento o calor alrededor de la uña, pus que le sale de la uña, o si tiene fiebre.