El corazón tiene su propio sistema eléctrico que ayuda a mantener el ritmo cardíaco y ayuda a controlar la rapidez con la que late.
La fibrilación auricular hace que las cavidades superiores del corazón, llamadas aurículas, tiemblen o fibrilen.
Esto ocurre porque pequeñas zonas de tejido cardíaco envían señales eléctricas adicionales.
Y eso altera el ritmo constante de los latidos del corazón.
Su corazón puede latir más rápido de lo normal.
Cuando no tiene un latido fuerte y constante, es un problema por un par de razones.
En primer lugar, aumenta su riesgo de ataque cerebral.
Esto se debe a que la sangre puede acumularse en el corazón y formar coágulos.
Y si un coágulo se traslada al cerebro, eso puede causar un ataque cerebral.
En segundo lugar, cuando el corazón no late a un ritmo, por ejemplo, si late demasiado rápido, el corazón puede debilitarse.
Y esto puede causar insuficiencia cardíaca.
Ahora bien, insuficiencia no significa que el corazón se detiene.
Significa que el corazón no bombea tanta sangre como el cuerpo necesita.
Por lo tanto, puede ver por qué es tan importante tratar la fibrilación auricular.
Ayuda a reducir el riesgo de ataque cerebral e insuficiencia cardíaca y le ayuda a sentirse mejor y vivir de manera segura con esta afección cardíaca.
El tratamiento puede incluir medicamentos, procedimientos o cambios de estilo de vida saludables para el corazón.
El tratamiento puede consistir en una o dos de estas cosas o una combinación de cosas.
Veamos cada tipo de tratamiento.
Los medicamentos sirven para controlar la frecuencia y el ritmo cardíacos y reducir el riesgo de ataque cerebral.
Y se pueden hacer procedimientos para que los latidos cardíacos regresen a un ritmo normal.
Un procedimiento se llama cardioversión.
Utiliza una descarga leve para que los latidos cardíacos vuelvan a la normalidad.
El otro procedimiento es la ablación, la cual destruye esas pequeñas zonas de tejido cardíaco que envían las señales eléctricas adicionales.
También puede ayudar a controlar la fibrilación auricular con un estilo de vida saludable para el corazón.
Esto incluye comer sano, bajar de peso, hacer actividad, limitar el alcohol y no fumar.
Los hábitos saludables pueden ayudar a reducir la frecuencia con la que tiene episodios de fibrilación auricular y ayudarle a vivir mejor.
Y si tiene sobrepeso, bajar de peso puede ayudar a aliviar los síntomas.
Por lo tanto, no importa cuál sea el tratamiento que usted y su médico decidan, la meta es hacer que se sienta mejor y prevenir futuros problemas.
De ese modo, puede esperar tener una mejor salud.