Este folleto ofrece ideas sobre cómo compartir noticias difíciles con los niños según su edad. Cuanto más pequeño sea su niño, menos detalles necesita compartir con él. Puede ser que le sea útil leer esto, y pensar en lo que le gustaría compartir antes de hablar con su hijo.

No importa cuánto desee proteger a sus hijos, a veces usted debe compartir noticias difíciles. Noticias como estas pueden cambiar la vida. La forma en que su hijo se entera de este tipo de noticias afecta la forma en que aprende a adaptarse y afrontarlas. No existe una sola manera de compartir este tipo de noticias con un niño; usted es quien lo conoce mejor. Este folleto y nuestro apoyo lo guiarán para que pueda compartir estas noticias cuidadosamente.

Preguntas Comunes

¿Soy la persona más indicada para compartir noticias difíciles con mi hijo?

Usted tiene un papel en ayudar a su hijo a hacer frente a los momentos difíciles de su vida. Usted es el experto en su hijo. Los miembros del equipo de atención médica de su hijo lo apoyarán y trabajarán con usted.

¿No es mejor proteger a mi hijo al no compartir noticias difíciles con él? ¿Por qué debo hacer que mi hijo se sienta triste?

El primer instinto de los padres es proteger los sentimientos de sus hijos. Nosotros creemos que es mejor ser abiertos y honestos con su hijo. A continuación le entregamos algunas ideas que podrían ayudarlo.

Los niños son fuertes y resilientes. Querrán que usted sea honesto y directo con ellos. Querrán saber cómo les afectará la noticia. Los niños no quieren que usted minimice las noticias.

¿No es mejor dejar de compartir noticias difíciles con ellos?

No mantenga las noticias en secreto. Su hijo puede preocuparse más por lo que no se dice que por la verdad. Si usted espera demasiado, es posible que su hijo se entere de las noticias por otras personas primero.

Esperar hasta que su hijo pregunte para compartir las noticias difíciles puede ser problemático. Es posible que algunos niños nunca lo mencionen.

¿Pero esperar no me ayudaría a esconder mis sentimientos de tristeza de mi hijo?

La mayoría de los niños enfrentan mejor las noticias difíciles si las conocen casi al mismo tiempo que el resto de la familia. Si a usted le preocupa que su tristeza atemorice a su hijo, explíquele que estos sentimientos y las lágrimas son una parte normal del hablar de este tipo de noticias. Asegúrese de que su hijo sepa que usted estará bien. Dejar que su hijo lo vea triste no lo dañará.

Compartir sus sentimientos puede hacer que se sientan más cercanos. Usted puede dar un ejemplo de cómo compartir sentimientos de forma sana. Esto puede ayudar a que su hijo se sienta seguro haciendo lo mismo con usted.

Enséñele a su hijo a encontrar palabras para sus sentimientos. Esto le ayudará a aprender a describir sus sentimientos a los demás. Si usted se encuentra demasiado afectado como para seguir hablando, haga un alto, y dígale a su hijo que hablarán más tarde.

¿Qué podría preguntarme mi hijo?

Esta es una lista de las preguntas más frecuentes que hacen los niños. Si usted no sabe la respuesta a una pregunta, está bien decir “No sé”.

  • ¿Me puedo contagiar?

  • ¿Morirá alguien?

  • ¿Es común en nuestra familia?

  • ¿Qué me pasará?

  • ¿Me dolerá?

  • ¿Alguien hizo algo malo para causaresto?

  • ¿Se está castigando a la personaenferma?

  • ¿Estoy siendo castigado?

Prepararse para Compartir Noticias Difíciles

Piense en las siguientes preguntas mientras se prepara para hablar con su hijo.

  • ¿A quién más quiero conmigo?Quizás usted desee que un familiar,amigo, doctor, enfermera, psicólogo,trabajadora social, capellán yespecialista en la vida de los niños loacompañen.

  • ¿Dónde debería compartir estasnoticias? Sería bueno elegir un lugartranquilo donde su hijo se sientaseguro y tenga sus cosas favoritascerca.

  • ¿Cuándo debo compartir estasnoticias? Elija un momento en queno habrá interrupciones y no haya unevento importante programado esedía.

¿Cómo preparo a mi hijo para recibir noticias difíciles?

Comience diciéndole a su hijo con voz calmada “Tengo algunas noticias difíciles que compartir contigo”. Esto evitará tomarlo desprevenido.

Pregúntele a su hijo lo que ya sabe. Es posible que tenga algunas ideas que no sean correctas o que sepa más de lo que usted cree.

Comparta las noticias poco a poco, destacando algunos puntos claves y luego verifique si su hijo entiende o tiene preguntas.

Consejos para Compartir Noticias Difíciles

  • Sea cariñoso y bríndele consuelo

  • Sea honesto y comparta sussentimientos.

  • Comparta las noticias con su hijo contanto detalle como usted crea quepueda asimilar.

  • Establezca contacto visual.

  • Explique que esto no es culpa de suhijo.

  • Escuche a su hijo y acepte sussentimientos, no importa cuáles sean.

  • Dele a su hijo la oportunidad dehacer preguntas en cualquiermomento.

  • Ayude a su hijo a pensar en otrosadultos de confianza con los que pueda hablar.

  • Elogie a su hijo por haberconversado con usted.

La Respuesta de su Hijo

Esté preparado para cualquier tipo de respuesta. No hay una manera correcta o incorrecta de comportarse. Su hijo puede reaccionar con:

  • Enojo

  • Frustración

  • Miedo al futuro

  • Impotencia

  • Confusión

  • Berrinches (Rabietas)

  • Actuado como un niño de menosedad

  • Cambiando sus hábitos para comer odormir

  • Pesadillas

  • Molestias físicas (dolor de estómago, etc.)

  • Shock

  • Negación

  • Tristeza

  • Vergüenza

  • Culpa

¿Importa la edad de mi hijo?

La manera en que usted comparte las noticias depende mucho de la edad de su hijo y de sus necesidades particulares. Este folleto contiene algunas ideas basadas en la edad del niño.

Niños de 0 a 18 meses

Si bien un bebé no entiende las noticias de la misma manera que un niño mayor, usted aún puede ayudarlo cuando su rutina cambie por la enfermedad o al estar alejado de sus padres.

Mantenga un número reducido de cuidadores para que cada uno puedan llegar a conocer bien a su bebé y para que su bebé se sienta seguro con ellos. Permanezca en contacto con los cuidadores para mantenerlos informados de los cambios diarios.

Intente evitar que la rutina y el entorno de su bebé cambien. Si usted no puede estar con su hijo, deje una grabación de su voz, una foto u otro objeto para consolarlo.

Niños de 18 meses a 3 años

Explique las noticias para que su hijo comprenda cómo le afectarán. Mantenga un número reducido de cuidadores que sean conocidos por su hijo. Esto ayudará cuando usted no pueda estar con él.

Ofrezca opciones a su hijo cuando sea posible. Mantenga la rutina de su hijo. Si es necesario cambiarla, dígaselo de una manera que pueda entender. Dele mucho tiempo para jugar y practicar habilidades nuevas, como el juego médico.

Niños de 3 a 6 años

Explique las noticias de manera honesta y sencilla. Pídale a su hijo que le diga lo que sabe.
Permanezca con su hijo tanto como pueda. Mantenga su rutina diaria. Dele mucho tiempo para jugar.

Cuando pueda, informe a su hijo sobre sus tratamientos y cambios con anticipación.

Es posible que un juguete, una cobija, una almohada o una foto puedan ayudar cuando usted no pueda estar con su hijo.

A su hijo le ayuda cuando usted mantiene los límites y las reglas que usaba antes.
Comparta las noticias con los maestros y los otros adultos presentes en la vida de su hijo, y dígale que estos adultos saben.

Niños de 7 a 12 años

Sea honesto y entregue detalles concretos a su hijo. Mantenga su vida lo más normal que pueda. Bríndele apoyo y reconocimiento. Ayude a que su hijo se mantenga en contacto con amigos y con las cosas que le gusta hacer. Ofrezca conversar con los amigos de sus hijos y con sus padres.

Comparta sus sentimientos con su hijo y hablen de los sentimientos que él tiene. Muestre y comparta ideas para ayudarlo a enfrentar el estrés (música, momentos de tranquilidad, respiración, etc.)

Si es un hermano el que está enfermo, asígnele algunas tareas adicionales en casa a su hijo sano, pero no demasiadas. Agradézcale por ayudar y dígale que está
orgulloso de que se preocupe por su hermano.

Dígale a su hijo que estas noticias difíciles no son su culpa. Explíquele lo que sucederá en los tratamientos y cómo podrían hacerlo sentir.

Comparta las noticias con los maestros y los otros adultos presentes en la vida de su hijo, y dígale que estos adultos saben.

Niños de 12 a 18 años

Muestre respeto, y dele espacio y privacidad a su hijo. Entréguele todo el control que pueda.

Si es un hermano el que está enfermo, ayude a su hijo sano a equilibrar el tiempo que pasa con su hermano y con sus amigos. Asígnele algunas tareas adicionales en casa, pero no demasiadas. Intente conversar en momentos en que no los interrumpan y cuando no haya un evento mayor programado más tarde ese día.

Involucre a su hijo en la toma de decisiones. Encuentre maneras de permitir que su hijo sea él mismo.

Comparta las noticias con los maestros y los otros adultos presentes en la vida de su hijo, y dígale que estos adultos saben.

Niños de todas las edades

Los niños pueden reaccionar a las noticias difíciles de maneras que no tienen sentido para los adultos. Los niños deben hacer frente a las noticias a su propio ritmo.

Esté atento a las señales que indiquen que su hijo pueda estar listo para hablar un poco más. Al principio, puede actuar como si no hubiera pasado nada y seguir jugando. Esto es común y normal. Su hijo también estará atento a sus señales. Dígale que usted está ahí para ayudarlo en el momento en que esté listo para hablar o tenga una pregunta.

¿Qué debo mantener en cuenta después de haber compartido las noticias?

Espere preguntas a medida que su hijo sigue pensando en las noticias. Pueden surgir nuevas preguntas a medida que él crece y madura. Esté presente para su hijo. Entréguele mucho amor y apoyo.

Es posible que a su hijo le preocupe que hablar de las noticias haga que usted se sienta triste. Ayúdele a ver que hablar sobre los sentimientos y hacer preguntas es saludable.

Es posible que los hermanos sanos se sientan culpables o que causaron la enfermedad. Sus hijos pueden comportarse mal si tienen problemas para hablar sobre de ello o son muy pequeños para saber cómo compartir estos sentimientos.

Esté dispuesto a pedir ayuda. Hay muchas personas que pueden brindarle apoyo a usted y a su hijo en el hospital o en su casa. Los psicólogos, terapistas, trabajadores sociales, capellanes, enfermeras, doctores, especialistas en la vida de los niños, maestros y consejeros pueden ayudar. También existen muchos libros y otros recursos que le pueden ayudar a usted y a su hijo. Ayude a su hijo a identificar a las personas a las que puede acudir en busca de apoyo.

Mantenga la vida lo más normal que pueda. Permita que su hijo se divierta sin sentirse culpable.

Esté preparado para repetir las cosas que ya habló con su hijo en la medida que él asimila las noticias, y acepta y entiende sus sentimientos. Avísele a su hijo cuando las cosas cambien. Manténgalo al día.

Pregúntele a su hijo a menudo si quiere hablar.

¿Cómo puedo saber si mi hijo necesita más ayuda?

A veces es difícil saber qué es normal y qué no lo es. Cada familia y cada niño son diferentes.

Es posible que su niño necesite ayuda adicional si:

  • Las formas normales en que apoya a su hijo no están funcionando.

  • El estado de ánimo o las acciones de su hijo interfieren en su vida en la escuela, el hogar o con los amigos.

  • Usted observa cambios en los hábitos para dormir o alimentarse de su hijo.

  • Las calificaciones de su hijo están bajando.

  • Su hijo evita la escuela.

  • Su hijo no quiere hacer cosas que solía disfrutar.

  • Su hijo permanece callado, triste, ansioso o temeroso.

  • Su hijo se queja de alguna enfermedad o un dolor (dolor de estómago, dolor de cabeza, cansancio).

  • Su hijo comienza a tomar decisiones no muy juiciosas (como no seguir las reglas, cambios negativos en su comportamiento, consumo de alcohol o drogas).

  • Le preocupa que su hijo se haga daño a sí mismo.